Los tiburones rara vez se enferman. De hecho, figuran entre las criaturas más resistentes de la tierra. Una herida de arpón en un tiburón puede cicatrizarse en menos de una semana. Incluso cuando han estado destripados y calgados por la cola en un muelle. Los tiburones supieron sacar fuerza para arrancar un trozo de del cuerpo de algún pescador desprevenido.

También parecen ser virtualmente inmunes al desarrollo de virus y hongos. Todo esto ha reforzado las esperanzas de los científicos de que el milagroso sistema inmunológico de los tiburones pudiera un día tener la respuesta a la cura de las enfermedades.        

Un estudio realizado en la Florida consistió en inyectar toxinas cancerosas a tiburones de nariz y se está aun a la espera que se produzca algún resultado. Durante años, los extractos de cartílago de tiburón han sido con silicona para producir una capa resistente de piel artificial en las victimas de quemaduras. 

A comienzos del año pasado, un equipo de instigadores descubrió una sustancia esteroidal en el hígado de los tiburones de lomo rayado, que ha resultado exitosa en el combate de parásitos, bacterias y virus intestinales. en pruebas de laboratorio. Los investigadores confían que la sustancia, llamada escualamina, puede usarse algún día  para combatir la disentería. infecciones fúngicas y ciertos males relacionados con las deficiencias inmunológicas.

Fuente:Hombresaludable